Una nueva disciplina emergente en el discurso actual : Fado-visual

[antonio-Brech]

La motivación por salvaguardar la presencia y el sentido, fruto de un esfuerzo común que ha forjado el espíritu de los pueblos del Noroeste de la Península Ibérica, sigue vigente 
A través de un lucido y pertinente seguimiento de la dimensión histórica y lingüística se llega de forma consecuente a la puesta en valor de una comprensión y abordaje de la realidad y del mundo, propia de una población que tiene unas características comunes y que son reflejo de una travesía larga y profunda que plagada de vicisitudes, llega hasta nuestros días.
La artificial bifurcación entre lusofonos y onstrimios , no ha conseguido destruir los argumentos en pro de unos lazos inalienables que han sido definidos por el paso del tiempo en convivencia compartida en una misma comunidad eco-psicológica.
Cabe destacar que ni los azares de la política, ni sus consecuencias sobre las cuestiones relativas tanto a la cultura como a la música popular y al pensamiento social, en absoluto han logrado subyugar las nobleza de los valores en los que ha ido encontrando soporte una sensibilidad colectiva y las condiciones mínimamente favorables para la supervivencia de una meta legalidad elíptica que impregna el alma galaico-portuguesa.
En un escenario contemporáneo en el que la tecnología y sus aplicaciones constituyen el centro del proceso de evolución del conocimiento , a causa de las transformaciones que implican el acceso universal a los nuevos medios con todas sus implicaciones, hay que tener en cuenta que a causa del impacto de este fenómeno de suma de medios con experiencia común, se generan cambios y mutaciones no baldías, en la dirección de una renovación del repertorio de los esquemas generales de acción tanto a nivel individual como colectivo.
Esta transformación de los recursos instrumentales supone una decantación irreversible hacia nuevas formas de actividad y de experiencia que curiosamente supone un nuevo reto de desarrollo que está en sintonía con las demandas y necesidades de dar forma a los deseos y pretensiones irrenunciables de ejercicio de libertad, que en esencia identifican el carácter universalista de las gentes del Noroeste marcadas por la amalgama afortunada de vivencias en la búsqueda y construcción de un destino justo y el logro de la meta que garantice que esto pueda ser disfrutado colectivamente en paz, a través de un saber que ha pasado de ser resultado de la transmisión intersubjetiva para su legalización, a manifestarse de manera horizontal y meta transversal.
Aprovecho la ocasión para suscitar una cuestión que es de gran calado en nuestro entorno y es el tema del origen, evolución y futuro del fado.
Este sucinta reflexión acerca del temperamento galaico-portugués me lleva a considerar como sensata reparar en esta observación: 
SIi los antecedentes son los que aquí se analizan, cual ha sido la aportación gallega al fado en todo su trasfondo? Cual la presencia gallega en la conformación del destino y la saudade de nuestro pueblo y de su expresión musical popular?.
Al final aunque parezca dormida la fortaleza de los gallegos , cabe evocar que latente en su corazón circula una corriente de conexión con lo universal que no podido ser destruida por el paso de los avatares prosaicos a lo largo de los siglos.
Mi posición en la actualidad se basa en la visualización ordinaria de nuestra vida cotidiana, desde que a los pocos años yo escuchaba en la radio música de fado, entonces residía en Badajoz , y fue mi música primera de preferencia , desplazando a la entonces incipiente presencia en nuestro entorno de la influencia musical anglosajona, a la música brasileña o hispanoamericana, cubana o tropical, y al tango, quizás porque me tocaba interiormente y con primacía ya que soy de origen gallego.
Con el tiempo, estos precedentes han provocado que la música que veo en mi mente , la denominaría y categorizaría con plena convicción y consistencia como fado visual.
Todos hemos podido constatar alguna vez, los efectos negativos de una derivación hacia la promoción de su propia supervivencia, dada la escasa libertad de los practicantes de la música popular, inmersos en un ambiente prolongado en el tiempo, poco propicio para mantener compromisos de beligerancia y confrontación sobre el progreso y la libertad sin embargo esto no debe empañar el verdadero tesoro de valores y referencias que ha generado nuestra historia común y que constituye un legado vivo y que conserva en toda su plenitud, su susceptibilidad de transformación y de apertura hacia contribuir al acierto y a aportar intensidad, con un denominador común que es el acceso a un discurso humano, más justo y universal.CONTINUARÁ